viernes, 13 de septiembre de 2013

Reflexiones de "La Diada"



Vaya por delante , que no soy nacionalista , quizá por qué no soy muy arraigado a nada , quizás por qué no acabo de tener claro que la Cataluña donde me tocará vivir , es el tipo de país en el que quiero vivir , pero eso ya se verá . Lo que también tengo claro , es que los países los construyen sus sociedades , y en especial , aquellas partes de la sociedad que toman parte, que se mojan . Cuando 1,6 millones de personas salen a la calle de una forma educada y ejemplar , sólo puedes decir , joder estos lo tienen claro ! saben lo que quieren y con todas . Creo que estamos en un punto de no retorno , al menos en la cabeza de la gente , y que ni un pacto fiscal ni mandangas cambiará las cosas . Todo tiene un sentido . Si incumples reiteradamente los pactos, como hace el gobierno central, pero si especialmente desprecias una parte de tu país y su cultura como se hace con Cataluña, no puedes esperar nada más, porque si lo haces, es que no tienes capacidad para gobernar y eso es lo que nos hemos encontrado . Una España enconada en un diálogo que no aporta, que no construye, que no es sensible y claro, la respuesta a esta actitud es la que vimos el once de septiembre. Dirán que la mayoría silenciosa no estaba, pero no dicen que el 45% de la gente se queda en casa a las elecciones y es lo mismo, también hay un 45% de mayoría silenciosa que simplemente no les importa absolutamente nada, así que no están legitimados para decir eso.
Si no te mojas, si no eres activo, si no tomas parte, sea con un pensamiento u otro, después quizás deberás asumir, que acabarás teniendo que aceptar los acontecimientos y lo que decida aquella gente que si, que lo vive y lo siente y activamente pretende lograrlo. Yo, como reconozco que tengo otros problemas más importantes (al menos para mí), no haré bandera, no lucharé por una opción clara, por qué nada me llama y el corazón nada me pide. Lo que si es seguro, es que aceptaré lo que decida la mayoría activa, la que sale, la que pide, por qué en el fondo es lo que hago cada cuatro años.
Así que para terminar, sólo me queda por felicitar a la gente que salió del once de septiembre (especialmente también a los organizadores), todos ellos con un sueño, con una ilusión de cambio, que hasta reconozco que me da envidia. Al final, en actos así se demuestra el apasionamiento sosegado de los Catalanes.



NOTA: Algunos dirán que desde aquí, desde el colegio, nos adoctrinan en un pensamiento único (desde luego no es mi caso), quizás tenga algo de verdad, pero sigo pensando, que al final como muchas cosas en la vida, ganan los adoctrinados más ordenados y trabajadores, quizás estemos delante de este caso. Solo cuando reconoces un problema puedes solventarlo, pero si no ves nada, si no quieres ver nada, solo te esperará un camino, el fracaso y eso es algo que los emprendedores tenemos muy claro. Veremos como acaba el cuento, mientras tanto, seguiremos sufriendo los parches, parches en; políticas económicas, de reactivación, laborales, de emprendimiento, de organización estatal. Como decía el calvo de la lotería, o su voz en off "que la suerte nos acompañe".

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